Una mujer que trabajaba como enfermera en una prisión fue acusada de envenenar a su esposo y provocar un incendio en su casa para así poder casarse con un interno de la cárcel.
Amy Murray, de 40 años, trabajaba en el Centro Correccional de la ciudad de Jefferson, Missouri, Estados Unidos, donde conoció a Eugene Claypool, también de 40, quien se encuentra preso desde hace más de 18 años por el asesinato de un hombre, de 72, quien había ganado más de un millón de dólares en la lotería y al que apuñaló. Para poder concretar libremente su amor, Murray decidió quitarle la vida a su marido, Joshua Murray, de 37 años. La víctima fue encontrada muerta después de un incendio registrado en la casa que compartían.
La oficina de bomberos y la oficina del sheriff determinaron que el incendio fue iniciado mediante el uso de un acelerador en la habitación principal. El cuerpo de Joshua fue encontrado sobre su cama, pero la autopsia reveló que había muerto antes del incendio, envenenado con un anticongelante llamado etilenglicol.
Amy Murray, una enfermera que trabajaba en la prisión, se enamoró de Eugene Claypool, un reo condenado por el asesinato de un anciano.
Las autoridades creen que Amy inició el incendio y después salió de casa con su hijo, de 11 años, y sus dos perros para dirigirse a un McDonald’s. La enfermera declaró que cuando regresó, la casa estaba en llamas y el humo era tan denso que no podía ingresar. Según los documentos de la Corte, dentro del inmueble se localizó un sándwich y una bolsa del restaurante al que había acudido. Además, según registros telefónicos, Amy había estado en su casa media hora antes de que el incendio fuera reportado a las autoridades.
Las evidencias contra Amy no terminan ahí: se grabó una conversación telefónica con Eugene en la que le comentó que le molestaba tener cerca a su esposo, con quien estaba casada desde 2003, y quería el divorcio.
La enfermera fue arrestada el jueves en conexión con la muerte de su esposo y enfrenta los cargos de asesinato en primer grado, incendio premeditado en segundo grado, manipulación de evidencia física y acción criminal armada. Su fianza se fijó en 750.000 dólares y mañana deberá presentarse a una audiencia para que se reduzca el monto de la fianza.
Fuente: LMN
