Un curioso suceso ha ocurrido en Ankara, la capital de Turquía. Es que un pequeño bebé llegó a este mundo con una marca de nacimiento que emula a un corazón en su frente.
Los padres, Murat Engin, de 30 años y su mujer Ceyda, de 28, se quedaron impactados al verlo. “Cuando lo vi de cerca me di cuenta de que era un corazón perfecto”, expresó el padre.
Rápidamente se convirtió en furor en las redes sociales en donde lo bautizaron como "el niño del amor". Los orgullosos padres aseguran que cuando salen a la calle con él la gente los para para sacarse fotos.
Pese a que los médicos aseguran que con el tiempo este tipo de marcas se desvanece, el bebé la tiene intacta desde hace un año. "Lo amamos a él y a su marca de nacimiento”, aseguran los papás.
