Una mujer quedó embarazada en 2014 y si bien se realizó diversos estudios médicos, ninguno dio resultados negativos. Actualmente su hijo tiene 4 años y síndrome de Down por lo que demandó a la clínica por no advertirle la situación dado que ella hubiera preferido abortarlo.
Edyta Mordel de 33 años oriunda del Reino Unido decidió demandar al Servicio Nacional de Salud debido a que durante su embarazo le realizaron varios estudios médicos pero en ninguno le diagnosticaron que su bebé nacería con síndrome de Down.
Actualmente, su hijo tiene 4 años y reclama 200 mil euros debido a que en caso de haber sabido que su hijo tendría trastorno genético, hubiera accedido a un aborto terapéutico. La declaración la hizo ante el Tribunal Superior de Londres, donde también aclaró que más allá de su opinión mantiene un permanente cuidado de su hijo Aleksander.
La mujer reconoció que al saber que su bebé tenía síndrome de Down “quedó devastada” debido a que ella había exigido todos los controles necesarios durante su embarazo. Dado que ahora debe debe afrontar algos costos financieros y dificultades para trabajar debido al cuidado de su hijo, la madre decidió iniciar la demanda.
En su testimonio, la mujer indicó que descubrió que estaba embarazada en 2014 y en ese momento le pidió a una enfermera que la examinar todo lo necesario para descartar posibles enfermedades en el bebé.
Por tal motivo, en el control de la semana 12 la mujer pensó que ya se había realizado la prueba y dado resultados positivos. Sin embargo, se determinó que el estudio no había sido hecho y aún así, el ecografísta rechazó la posibilidad de síndrome de Down.
Por su parte, desde el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido se defendieron indicando que a la mujer se le ofrecieron las pruebas pero ella las rechazó. Desde el organismo, también expresaron que lamentan el pensamiento de la mujer tras el nacimiento del bebé.
Como parte de los testimonios, los médicos revelaron que al momento del parto ocurrido en enero de 2015 por cesárea, la mamá se mostró “muy molesta y enojada” al saber el diagnóstico de su bebé.
Aún así, la mamá que se manifestó ante el Tribunal a favor del aborto terapéutico, sostuvo: “Hablé con la partera sobre el examen de detección del síndrome de Down. Me había informado. Vi muchos videos y leí sobre la proyección. Sabía desde el principio que no tomaría ninguna otra decisión”.
Por su parte, la abogada de Edyta retomó los dichos de su defendida y aseguró que en caso de saber que el bebé tendría síndrome de Down “ no se habría realizado el embarazo”.
Fuente: La Cien