Tenía apenas 20 meses de vida y una sonrisa compradora. Sin embargo alguien truncó su futuro y no solo la mató a cuchillazos sino que además murió "cocinada" en un horno. El horroroso hecho sucedió en Mississipi y conmocionó al mundo.
Se llamaba Marie Floyd y el cuerpo apareció cocinado en la casa de su abuela Carolyn Jones, de 48 años de edad quien hoy es la única detenida por el aberrante hecho. La mujer fue arrestada en el lugar donde apareció el cuerpo y fue acusada de asesinato en primer grado.
Según publicó The Sun, la abuela compareció ante el tribunal el martes pasado, donde un juez fijó una fianza 500,000 dólares. "Esto es una de las cosas más horribles que me ha tocado ver en todos los años que vengo ejerciendo este trabajo, desde hace 25 o 26 años. La parte más difícil es ver a una víctima que es un niño", señaló el alguacil del condado de Bolívar, Kelvin Williams a Associated Press.
Desde la policía aseguraron que la niña había estado viviendo con su abuela ya que su madre, Veronica Jones, vivía en otro lugar. En este contexto, la madre de la nena dijo que no cree que Carolyn sea la culpable del asesinato porque ella "amaba a su hija".
"Me han dicho que mi madre apuñaló a mi hija y la hizo en el horno, pero mi madre amaba a mi hija... Ella siempre trató a Royalty como a Royalty y todos los que nos conocen lo saben... Para mi hija Royalty 'Mamá siempre te amará y vivirás en todos nuestros corazones para siempre'", dijo en su cuenta de facebook.