jueves, 7 de enero de 2016
14:32
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Henry Ramos Allup ordenó sacar todos los afiches y fotografías del ex mandatario de la sede legislativa y generó una polémica con el gobierno de Venezuela. Esta medida fue tomada por el Ejecutivo como una afrenta al líder de la Revolución Bolivariana.
Ramos ordenó a los trabajadores de la Asamblea Nacional (AN, parlamento unicameral) desalojar del edificio los afiches, muchos de ellos en formato de gigantografías, del fallecido ex jefe de Estado, así como algunas imágenes del héroe independentista Simón Bolívar.
Fue su primera decisión después de juramentarse el martes como jefe de la Asamblea, que quedó bajo control de la mayoría opositora por primera vez en 16 años.
"Que se los lleven para Sabaneta (ciudad natal de Chávez), el que quiera prenderle velas que se lo lleve para Sabaneta, que se lo lleven a las hijas, a las viudas. Esta vaina no es cementerio", dijo Ramos.
El líder legislativo instó a los trabajadores a llevarse los afiches a la casa de gobierno de Miraflores o al "aseo". "No quiero ver aquí a Chávez, ni a Maduro. Llévense toda esa vaina para Miraflores o se la dan al aseo", insistió.
Por su parte, el presidente Nicolás Maduro llamó a los partidarios del gobierno a actos de "desagravio" a Chávez. "Llamo al pueblo a rebelarse ante estas manifestaciones neofascistas y antibolivarianas", dijo en un mensaje transmitido en cadena de radio y televisión.
"Llamamos al pueblo a realizar actos de desagravio. Intentan mancillar la memoria histórica, la memoria de nuestro comandante supremo Hugo Chávez, el líder político más importante del siglo XX y creo que del XXI", aseveró.
Maduro calificó de "vulgar" la medida de Ramos, a quien acusó de socavar los "sentimientos nobles de millones de venezolanos y no respetar la memoria de un hombre que cuando murió era presidente y comandante en jefe de la Fuerza Armada".
"¿Si ellos tomaron ese poquito de poder en la Asamblea y no tienen respeto para millones de venezolanos, qué se puede esperar que venga de esa Asamblea burguesa?, se preguntó.
Maduro, quien se autodefine como hijo de Chávez, señaló que el pueblo debe reaccionar ante los "agravios" cometidos por Ramos en su primer día como jefe de la Asamblea.
Chávez, quien murió en marzo de 2013 con 58 años a causa de un cáncer, reflotó en el sentimiento nacional la figura de Bolívar, incluso desde que irrumpió en la escena política en febrero de 1992 cuando encabezó un fallido golpe de Estado.
Bolívar y Chávez son las principales figuras de la revolución bolivariana, que llegó al poder en 1999.
El tema fue llevado al debate en la primera sesión de la Asamblea, en la que la bancada oficialista protestó por el hecho y lo asumió como una "ofensa" para el pueblo chavista. El diputado oficialista Víctor Clark exigió respeto a la libertad de pensamiento y de expresión para quienes admiran a Chávez.
"Hugo Chávez no es un cuadro, no es un mobiliario, es un sujeto político y aquí está, representado en la bancada de 54 parlamentarios. Ustedes jamás desaparecerán a un hombre de la historia contemporánea", dijo.
La mayoría opositora llegó a la Asamblea sobre el lema de "cambio político" y uno de los primeros anuncios de Ramos fue que impulsará en los próximos seis meses un mecanismo "constitucional, pacífico y electoral" para sacar del poder a Maduro.
Fuente: Télam
