lunes, 21 de diciembre de 2015
12:45
lunes, 21 de diciembre de 2015
12:45
Son 11 pequeños cuadrados con 43 electrodos cada uno; cuando son estimulados en forma eléctrica, generan un impulso que el cerebro interpreta como un punto de luz. Así, la combinación de este estímulo serviría para generar una imagen de unos 500 pixeles de resolución: mucho más bajo que lo que puede procesar un ojo humano convencional, pero aún así permite un mínimo de visión que hasta ahora era imposible.
Las imágenes que reciban estos chips serán tomadas por una cámara montada en unos anteojos y preprocesadas en una computadora que deberá llevar el usuario; los anteojos transmitirán la información en forma inalámbrica al chip. Es, como le dijo Anthony Lowery, el investigador que comanda el desarrollo, a la revista NewScientist, como un dibujante de historietas, que simplifica una imagen para representarla con un mínimo de información.
El primer voluntario probará este ojo biónico en Australia el año próximo.
Fuente: La Nación