jueves, 27 de marzo de 2014
09:42
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La sociedad en Guamúchil, Sinaloa en México, está conmocionada por el asesinato de Anel Baéz, a manos de su amiga Erandy Gutiérrez, quien debido a fotografías de ambas supuestamente subidas a Facebook, la mató de 65 puñaladas, crimen que estremeció a los habitantes de esa región.
El crimen ocurrió el 19 de marzo. De acuerdo a lo revelado por otras amigas de la adolescente, el día del asesinato, Erandy Elizabeth, se dirigió a la casa de Anel Báez, la víctima, para matarla. Allí, ambas compartieron una conversación y minutos después, Erandy fue a la cocina, tomó un cuchillo y sin mediar palabras, le aplicó por lo menos 65 puñaladas.
La adolescente fue detenida cuando acudió al funeral de su amiga.
Por su lado, el procurador de Justicia, Marco Antonio Higuera dijo que Erandy es la responsable del crimen y afirmó que por ser menor, lo único que se puede hacer es internarla por siete años. Mientras tanto, los familiares de la víctima realizaron una marcha para exigir un castigo más severo.
La verdad que no existen palabras para describir a una persona que comete este tipo de locuras. Es algo de lo qe todos los guamuchilenses estamoos en shock, al saber cómo alguien de tan corta edad puede destrozar la vida de dos familiias por equis causas, que no tuvo justificacion. En este tipo de deliitos se da cuenta uno de que nunca terminas de conocer a una persona por mas unida que estés a ella.Nadie en esta vida tiene el derecho de arrebar la vida a alguien mas. Ella le destrozo quiso destruirle la vida a su "amiga", pero Anel está descansando con su mamá, sin embargo, la asesina sufrirá en carne viva el doble lo que le hizo sufrir a ella. No soy nadie para juzgar, sólo digo la triste y cruel realidad. Mi más sentido pésame para familia, que sepan que todo Guamuchil está con ellos, pidiendo justicia", escribió un usuario en la propia página de Facebook de Erandy.
Es tal la indignación que en redes sociales llaman a la joven asesina como La Demonio. Erandy y Anel, ambas de 16 años, eran inseparables, hasta que la relación dio un giro para vestirla de tragedia.
