viernes, 20 de septiembre de 2013
10:07
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Es uno de los edificios más emblemáticos de Nueva York. Está en el corazón de la gran manzana y su imagen apareció miles de veces en distintas películas rodadas en Estados Unidos. El Empire State es un ícono y ahora sus administradores decidieron ponerlo en venta. El hecho ya movilizó a gran parte de personas en el mundo, no por las ganas de comprarlo (es casi imposible) sino porque su venta quedará marcada en la historia de Norte América. Es que al rascacielos se lo recuerda gracias a la escena final de la película King Kong (1933), en la que el monstruoso gorila lucha desde este lugar contra decena de aviones militares que lo quieren matar.
El proceso de convocatoria a compradores, el "roadshow” según la sociedad de inversión de bienes raíces Empire State Realty Trust, comenzará la semana que viene y según señala la agencia de noticias AFP, el fondo inmobiliario Thor Equities quiere comprar el famoso rascacielos, en momentos en que el edificio prepara una entrada en Bolsa por más de US$ 1.000 millones. "Thor ha hecho dos ofertas, una por más de US$ 1.180 millones, a Empire Building Associates, que posee el terreno y el edificio, y los arrendamientos del rascacielos”, explicó Jason Meister, de Thor.
Según indica Diario La Tercera, la otra oferta es por el 63,8% que la sociedad de inversión Helmsley Estate Interest tiene del Empire State Building, la empresa que subarrienda el rascacielos, que tiene contrato hasta 2076. En junio, Thor había hecho ya una oferta de US$ 2.100 millones por todas las entidades que controlan el Empire State Building, que según los documentos de Bolsa está valorizado en US$ 2.500 millones, deuda incluida.
La venta del emblemático edificio también incluye una torre de cemento de 102 pisos y otras 18 propiedades de los Malkin ubicados en Manhattan y sus alrededores. Pero los analistas dicen que existe inquietud por el hecho de que dos tercios de los ingresos del Empire State son generados por el observatorio. Este enfrentará la competencia de la One World Trade Center, que reemplazará a las Torres Gemelas, cuando sea inaugurado en 2015.
Situado en la intersección de la Quinta Avenida y la calle 34, fue el edificio más alto del mundo durante más de cuatro décadas, desde que terminó su construcción en 1931 y conservó el título hasta 1972, año en que se completó la construcción de la torre norte del World Trade Center.
Tras los atentados terroristas contra el World Trade Center, el 11 de septiembre de 2001, el Empire State se convirtió nuevamente en el edificio más alto de Nueva York. Pero fue nuevamente superado por el One World Trade Center, que el día 30 de abril de 2012 se erigió como la torre más alta de la ciudad que nunca duerme. El Empire State fue nombrado por la Sociedad Estadounidense de Ingenieros Civiles como una de las Siete Maravillas del mundo moderno, pero igualmente esa denominación se tambalea con las nuevas técnicas de construcción.
