Según informó la revista Famiglia Cristiana, Francisco recibió ese auto como regalo del sacerdote italiano Renzo Zocca, quien lo usó durante muchos años para "ir más allá de su parroquia" en un barrio obrero de Verona.
Zocca, que hoy tiene 70 años, ofreció al Papa ese vehículo, "que ya hizo mucho por los pobres", y se lo llevó al Vaticano el sábado.En los años 80, Zocca vivió en un barrio obrero de Verona donde fue amenazado y sufrió atentados por su trabajo de asistencia a jóvenes que consumían drogas. Francisco llegó a la vigilia que convocó en Plaza San Pedro para rezar por la paz en Siria arriba de este auto, que llamó la atención de todo el mundo y que en España le dicen "cuatro latas”.
Fuente: Los Andes