El pasado martes 4 de septiembre, un alumno de la escuela secundaria Pedro Bonifacio Palacios, de Jáchal, compartió con sus compañeros una dosis no confirmada de gotas para dormir Rivotril y como consecuencia, varios terminaron en el Hospital departamental. A casi una semana del hecho, los alumnos están recuperados en su salud pero el ministerio de Educación comenzó a aplicar talleres para el cuidado no solo en el chico que hizo "la picardía" sino también en todo el curso.
"El taller tiene que ver con el cuidado integral como personas, esto tiene que ver con la salud y el cuidado del otro, su compañero, su par", indicó la directora gabinete interdisciplinario, Mónica Gutierrez en radio Colón.
Según informó, el objetivo es que el niño sepa lo bueno y malo de sus actos y cómo repercute en los otros sea o no una picardía. Al respecto indicó que lo que ocurrió en esta escuela de Jáchal se ha dado en otros establecimientos de la provincia, pero con otros hechos a manera de broma de los alumnos.
"Las comunicaciones que tenemos en el Ministerio de Educación no han crecido, son valores parecidos al semestre anterior, son complejas que se denuncian y se pone el conocimiento para actuar", agregó.
Ante este escenario, se está trabajando con el Sedronar también con los docentes en el tema preventivo porque un chiste de chicos podría ser en realidad reflejo de una problemática de adicción..
Por este hecho, el ministerio de Educación inició expediente investigando la situación y entrevistando a la directora Erika Aballay, docentes, preceptores y personal de maestranza que estaban en turno al momento del hecho denunciado y a los alumnos involucrados, para determinar responsabilidades y competencias.
Además, se tomó contacto con los alumnos y los padres de los estudiantes y se aplicó el protocolo del Programa de Intervenciones Inmediatas ante Situaciones de Complejidad. Los profesionales de Gabinetes y autoridades del Ministerio, seguirán trabajando en la escuela.
