El último hecho que salió a la vista esta semana vinculado a un alumno que lleva un arma de fuego a la escuela, ha llevado a que desde el Ministerio de Educación analicen la posibilidad de hacer un cambio estructural para el 2014. Se trata de separar los niveles secundarios y primarios con el fin de que "los mayores no influyan a los menores", según aseguraron altas fuentes del ministerio.
La medida, que está en la etapa de análisis de posibilidad, tendría un alcance no solo para esta institución sino también para varias escuelas que son las que más conflicto han registrado en los últimos años. Para tomar cualquier medida de este tipo, los profesionales de las distintas áreas analizarán la factibilidad en función de muchos factores como los recursos económicos de las familias y la disposición horaria de los docentes. "No tenemos que negar que hay padres que tienen niños en la primaria y otros en la secundaria y los llevan a todos al mismo turno, de lo contrario se les complicaría la distribución a los padres", destacaron.
El hecho que hizo que los funcionarios empezaran a evaluar nuevas medidas, está vinculado a la violencia que roza con lo delictivo sucedido en la escuela Hipólito Yrigoyen. El martes se hizo público el caso de un alumno de la secundaria que llevó a la escuela un arma con la intención de robar a sus compañeros y docentes. Esto hizo que ocho padres pusieran una exposición en la policía y aseguraran que a partir del año que viene sacarán a sus niños de esta institución para evitar males mayores, ya que los chicos de la secundaria son una "mala influencia para los de la primaria".
Frente a esto desde el ministerio de Educación aseguraron que están evaluando medidas a tomar pero que la solución no sería simplemente el cambio de turno ya que hay un problema de fondo. Por ello la posibilidad de cambio desde el año que viene va a depender de una serie de análisis que hagan en los meses que vengan.
