Nada es fácil en la vida. Pero si las cosas se hacen con esfuerzo y dedicación tienen un valor especial. María Mercedes Quiroga y Antonio Domingo son dos jóvenes que le dedican su vida al estudio. Ella tiene 35 años y posee un problema neuronal que le impide hablar con facilidad y movilizarse por sus propios medios sin embargo no afecta su nivel intelectual. En el caso de él, tiene 19 años y es no vidente casi al 100%. Ambos cursan estudios universitarios y sueñan con ser destacados profesionales en el medio sanjuanino.
María Mercedes transita el quinto año de la licenciatura en Letras en la Facultad de Filosofía de la Universidad Nacional de San Juan. Le quedan sólo cuatro materias para recibirse y ya piensa en hacer la tesis vinculando el tema discapacidad con el lenguaje. Junto a ella se encuentra Ana Gallardo, su terapeuta que se convirtió en gran parte de su carrera en el pilar de estudio.
"La carrera es muy pesada pero le dedico muchas horas porque me gusta, lo que más me llama la atención es el arte de la lingüística", comentó Mercedes con dificultad y luego agregó que escribe poesías de todo tipo y su sueño es poder abordar lo aprendido en el ámbito de la discapacidad. La joven forma parte del Comité de Discapacidad de la Universidad Nacional de San Juan y realiza deportes como bochas en el club Del Bono.
Al igual que Mercedes, los sueños son los que impulsan a Antonio para seguir adelante en sus estudios. El joven tiene 19 años y cursa primer año de Abogacía en la Facultad de Ciencias Sociales de la misma universidad. "Un lugar importante en este proceso formativo ocupan los docentes. Gracias al apoyo de ellos uno puede seguir estudiando", confesó el chico quien cursó todos estudios de la primaria y secundaria en la escuela Nueva Juan Fansolato. Esta institución, a través de un convenio con la escuela Braile, brindó al joven las herramientas y posibilidades de formarse con fuerza en la lectura de este sistema especial.
"Los recuerdos que guardo de mi secundaria son muy lindos. La integración con mis compañeros fue muy fuerte y ahora en la facultad los nuevos compañeros son los que me ayudan a estudiar y seguir adelante en esta carrera", puntualizó Antonio.
Tanto él como Mercedes recibieron en la mañana del miércoles una notebook cada uno para que el camino de aprendizaje sea más completo. Ahora los chicos deberán adaptarle una serie de programas en función de sus necesidades. "Me llena de orgullo que me eligieran para entregarme la notebook. Es algo que fomenta mi estudio y las ganas de seguir", finalizó Antonio.
