El "estoy mirando" o "¿me puedo probar?" ya son frases que no resuenan en los comercios sanjuaninos de los populares rubros como indumentaria y calzado. Es que con la cuarentena preventiva por coronavirus todo cambió en ese sector de la economía y desde esta semana, se autorizó la venta online o por teléfono.
Si bien algunas casas comerciales ya habían incursionado en las ventas por Internet o usando las redes sociales para promocionar sobre todo, los nuevos ingresos de mercadería o liquidaciones, ahora son vidriera y "caja registradora". "Lo positivo de esto es que se está volviendo a la actividad y generando nuevamente el vínculo con la clientela; de esta forma. Hay compradores más receptivos que otros, por supuesto pero en general un grupo muy importante de comercios ya tenía sus redes sociales activas", señaló desde la Cámara de Comercio de San Juan, Hermes Rodríguez, a Diario La Provincia SJ.
"Lo que más cuesta es confiar en que se compra algo que se ve en una imagen ilustrativa. Al sanjuanino le gusta comprobar la calidad teniendo el producto en sus manos. Los comercios trabajan en su confiabilidad para ofrecer lo que se eligió y que los tiempos de entrega sean claros. Además, que el medio de pago sea seguro. Se generan enlaces con plataformas como Mercado Pago y otros, se animan a manejarse con efectivo en el puerta a puerta", agregó. En ese sentido, todo está en vías de ajustarse ya que se están organizando para llevar la mercadería a las zonas en las que se tiene real llegada. "Hay comerciantes que pudieron llevarse mercadería a sus casas y desde allí reciben y organizan perdidos que ellos mismos entregan".
Por ahora, los canales más populares de contacto son redes sociales (Facebook e Instagram), WhatsApp y teléfono, mientras que las páginas Web sólo las tienen operativas algunas casas comerciales que ya las habían estrenado mucho antes de la cuarentena. "Por estos días hay muchas consultas y creemos que con el transcurso de los días, se irán concretando ventas por supuesto, con un ritmo y cantidad distintos", apuntó.
En tanto en la mayoría de los locales del microcentro se trabaja a puertas cerradas con parte del personal y se van rotando grupos por días o por semanas, para respetar las normas preventivas del distanciamiento social. Hubo denuncias del Sindicato de Empleados de Comercio en casos puntuales y este martes hubo nuevos operativos, en comercios del rubro librería que habrían infringido la cuarentena.
Los cambios de mercadería
Algo sobre lo que se consulta mucho es la posibilidad de cambiar lo que se compró, si no gustó o no queda por talles. "Eso se aclara antes de cerrar la compra. Se ven los mecanismos para concretarlo y los tiempos también ya que se tiene que pasar a buscar el producto; el cliente no puede ir al local", manifestó.
Además, los comercios deben ser claros sobre la existencia de talles y números de calzados "para evitar malos entendidos y ante todo, el descontento del cliente que puede restar a la nueva imagen virtual que tienen que fortalecer las empresas".
