Se vive un clima tenso en el Monumental. Tras las agresiones a los jugadores de Boca que impidieron que pudiera disputarse la revancha de la Superfinal de la Copa Libertadores y que le costaron la localía al club de Núñez, los hinchas se hicieron escuchar.
Hubieron dos claros apuntados: la Conmebol y la barra. Desde la previa del encuentro ante Gimnasia por la Superliga, se pudieron ver las banderas dadas vuelta en repudio a la decisión de la Confederación Sudamericana de jugar la gran final en Madrid.
Por su parte, hubo un repudio generalizado para los Borrachos del Tablón. Cuando la hinchada ingresó a la popular, se escucharon chiflidos desde todas partes del estadio y cantaron: "Que se vayan todos, que no quede ni uno solo".
Pase lo que pase, la fiesta de la Libertadores ya no será completa. En caso de ganar, la mayoría de los simpatizantes no tendrán la chance de celebrar junto a sus jugadores como alguna vez soñaron y serán pocos los privilegiados que podrán viajar a España a ver este duelo histórico.
El domingo 9 de diciembre, River y Boca se enfrentarán en el Santiago Bernabéu por la revancha de la final de la Copa Libertadores. El ganador se consagrará campeón y conseguirá una plaza para el Mundial de Clubes.
Fuente: TN
