Es una versión que se vino manejando a lo largo de toda la mañana y, luego de un importante tire y afloje, se terminó de confirmar a las 14, con los hinchas ya dentro de la cancha: se postergó la Superfinal de la Copa Libertadores.
El encargado de comunicar esta decisión fue Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol. "Es una vergenza que estemos hablando de una situación así por culpa de unos inadaptados. Esto es un partido de fútbol. Es una vergüenza la imagen que se ha mandado al mundo. Esto no es lo que nosotros queremos", comenzó el dirigente en una entrevista con Fox Sports.
"Los futbolistas son profesionales que viven, trabajan, se esfuerzan y enseñan con los buenos ejemplos dentro y fuera de la cancha. Tienen familia de quienes se hacen responsables y viven de esta profesión que tanto nos apasiona", continuó Domínguez y agregó: "Hoy nos encontramos en que tenemos que analizar una desigualdad deportiva. No están dadas las condiciones, hay un equipo que fue agredido y nosotros estamos aquí por el bien del espectáculo".
"La organización está para generar un buen espectáculos deportivo, que se genere igualdad de condiciones y confianza", insistió. "En función de eso, el consejo de la Conmebol tomó la decisión de que en estas condiciones no hay igualdad deportiva y no se garantiza el espectáculo", sostuvo.
El martes 27 a las 10 de la mañana, se reunirán todas las partes en Asunción para definir el día y horario para la reprogramación del duelo. Hoy por hoy, toma mucha fuerza la chance de que se juegue el 8 de diciembre y nadie garantiza que sea en el Monumental.
Fuente: TN