domingo, 13 de julio de 2014
18:46
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Argentina perdió ante Alemania y de esta forma dejó ir el gran sueño de levantar la Copa del Mundo en Brasil. Las lágrimas en los jugadores se derramaron en cuanto el árbitrro indicó el final del partido.
Esas lágrimas expresaron el dolor de una oportunidad perdida. Pero para la hinchada argentina no es una derrota, sino es el reflejo del sueño que se mantuvo invicto durante un mes y que hoy no merece un reproche sino un "gracias" por haber permitido mantener tanta felicidad por tanto tiempo.