El trofeo ya está en la cancha del Maracaná a la espera del ganador que saldrá del choque entre Argentina y Alemania por la Final del Mundial que se disputa desde hace un mes en Brasil.
Ante un estadio totalmente colmado, la copa ingresó de la mano de representantes de España, último ganador, y Brasil, anfitrión. La copa pesa 6,170 kg en total y representa a dos figuras humanas sosteniendo al planeta Tierra. Éste fue realizado, como siempre, en un pequeño pueblo del norte italiano, Pademo Dugnano, en cercanías de Milán, por la empresa Bertoni Milano.