Nicolás Naranjo llegó al ciclismo casi por casualidad. O quizás no tanto. A su hermano mayor el médico le había aconsejado practicar un deporte, y como su papá fue ciclista hacia allí apuntaron. Nico iba nada más que a acompañar, pero lo tentaron para que largara en su bicicleta de paseo. Fue suficiente para que abrazara el ciclismo como su deporte preferido.
En el cuadrado que forman las calles frente al RIM 22 fue el bautismo de fuego, los primeros del ciclista que es hoy, el que disputa su primer año en la categoría Elite y que ganó las dos fechas de la temporada de pista de la Federación Ciclista Sanjuanina.
Se acostumbró a ganar de chiquito. Se consagró Campeón Argentino tres veces en categoría Infanto Juvenil, 1997, 1999 y el último año en Junior: 2007. Sin embargo, hubo una época en que no ganaba absolutamente nada. Eso lo llevó a perder el entusiasmo por el ciclismo y largó. "Debe haber sido entre los 9 y 10 años. Es que tardé más de la cuenta en desarrollarme y quedé en desventaja física”, contó el ciclista de 23 años de La Bebida.
"Después aprendí que con esfuerzo y trabajo todo se puede conseguir”, reflexionó. Con ese lema volvió y en 2007 fue Campeón Argentino en la especialidad Cuarteta. Al año siguiente fue Subcampeón Argentino en Rafaela, en Madison o Americana, y en la misma especialidad y en pelotón en los Juegos Binacionales de Chile.
Hoy sus sueños están puestos en ganar un clásica, "me encantaría que sea la Difunta Correa” y el Argentino de Pista que se correrá en octubre en el velódromo de Rawson. Ya está en la preselección que dirigen el Pollo Ernesto Fernández y el Polilla Rubén Ramos.Pero como en su vida no todo es ciclismo, o es consciente que no se puede vivir sólo de eso, cursa el segundo año de Educación Física en la Universidad Católica. A eso también lo entendió después, por eso pasaron varios años desde que terminó la secundaria para decidirse por estudio.
"Empecé en el ISEF (Instituto Superior de Enseñanza Física), en La Granja, pero me quedaba muy lejos y no disponía de tiempo para entrenar. Entonces no podía hacer las dos cosas”, explicó el integrante del equipo de la Municipalidad de Rawson.
No es fácil, de 8 a 13 concurre a la facultad y en la siesta actualmente entrena entre 70 y 90 kilómetros diarios. "Más adelante deberé hacer entre 100 y 120 kilómetros para llegar en óptimas condiciones al Argentino”. Por la falta de tiempo sólo le dedica un día a la natación.
Naranjo empezará a trabajar con la preselección sanjuanina el 1 de julio junto al Chino Emanuel Saldaño, el Bam Bam Emiliano Fernández, Juan Gáspari, Emiliano Contreras, Víctor Arroyo, El Pelado Rubén Ramos, Alan Ramírez, Gerardo Tivani y Cristian Romero.
Dice que le gusta la pista, pero que también lo atrapa la pasión de la gente que sigue el ciclismo rutero. "Lo que más me gusta es el fondo, la carrera a los puntos, la Madison y el Scratch”, agregó.
Dijo no haber arrancado la temporada de pista al cien por ciento por aquello de que quiere llegar al techo de su rendimiento allá por octubre en el Campeonato Argentino de Pista que tendrá por escenario el remozado velódromo Héroes de Malvinas. Menos mal, porque ganó la primera cita en Vicente Alejo Chancay del Parque de Mayo y la segunda en Rawson.
¡Ah!, tiene otro sueño: Ser convocado a la selección Argentina de mayores. Es que sin triunfos, objetivos, metas y sueños Nico Naranjo se aburre y larga todo.
