Para aprovechar las horas libres

El hombre que decidió hacer dinosaurios cuando le llegó su jubilación

Rosendo Carrizo es artesano desde hace poco menos de un año y ya lleva decenas de obras hechas que llaman la atención del público por la precisión de sus formas.
sábado, 24 de agosto de 2013 19:32
sábado, 24 de agosto de 2013 19:32

Tiene 66 años y hace poco se jubiló. Hasta hace un tiempo se dedicaba a la administración pública y su vida pasaba del trabajo a la casa y de la casa al trabajo. La vida le cambió 100% cuando debió tener una nueva rutina, muy diferente a la que tenía cuando trabajaba. Ya no se debía levantar temprano y tenía que generar algo para hacer, antes de que el aburrimiento lo encontrara. Por eso empezó a seguir los pasos de su hijo: hacer pequeñas esculturas de dinosaurios.

Rosendo Carrizo es artesano desde hace poco menos de un año y ya lleva decenas de obras hechas que llaman la atención por la precisión de sus formas. "Siempre solía ver a mi hijo hacer cosas con cartapesta y yo le compraba libros que mostraban las formas de dinosaurios y él las hacía. Entonces un día, cuando me enteré que me estaba por llegar la jubilación empecé a ayudarle a mi hijo. Al principio miraba pero luego me animé. Ahora él ya no hace esto porque pasa muchas horas trabajando y yo, en cambio, me dedico a hacerlos porque estoy jubilado", comentó Rosendo a Diario La Provincia.

Las esculturas las hace con un armazón de alambre y luego lo forra con papel bajo la técnica cartapesta y le coloca los dientes que en realidad son palillos o espinas de rosales. Las obras las pinta con témperas y le pone barniz para darle más firmeza. Alrededor de cuatro días le lleva hacer todo porque "el secado es lo que más cuesta". El lugar que elige para trabajar es el living de su casa. Allí distribuye todos los materiales y con todo el tiempo del mundo a su favor se dispone a trabajar, "las horas que sea". Su esposa, Nidia Charra lo ayuda y estimula porque para ella es la oportunidad que tiene de compartir más tiempo con su marido.

"Antes nos veíamos poco en comparación ahora. Pero está bueno todo esto porque estamos más tiempo juntos y yo lo ayudo", dijo la mujer entre risas para luego aclarar que levanta todos los papeles que "deja tirado" cuando termina de trabajar en estas esculturas.

En realidad los dinosaurios son para ambos una forma de entretenerse y que les da una ganancia. Es que ambos ya participaron este año en las dos fiestas del Carneo Español y estuvieron con un stand en la Misa Criolla. Además exponen en la Plaza de Rawson todos los fines de semana, donde ya todos los conocen.

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