El caso de la desaparición de la soldado calingastina María Eugenia Alcayaga sigue sumando nuevas aristas. Ahora, el jefe del RIM 16 de Uspallata aseguró que la chica habló de pedir la baja de la Fuerza, en medio de una crisis de nervios, el jueves 3, es decir el último día que se presentó a trabajar.
En diálogo con radio Manantial, el teniente coronel Rolando manifestó que "el jueves estaba con crisis de nervios y le dijo al jefe responsable de Infantería de Montada, donde ella trabajaba, que tenía intenciones de irse de baja. Era por un tema particular. La contuvimos y le dijimos que lo pensara más tranquila. Esto es algo que sucede con los soldados nuevos y acordábamos que lo charlábamos después".
Eugenia llevaba solo dos meses en el Regimiento, según Rolando, y después de recibir instrucción militar se la asignó a la división de Infantería de Montada.
"Acá no hay nada que ocultar y apoyamos a la policía y a la justicia en lo que necesiten. El día de la desaparición acompañamos a sus padres en la comisaría y hasta dispusimos un vehículo para que pudieran ir hasta Luján de Cuyo a realizar la denuncia", agregó.
Rolando resaltó que Eugenia tenía franco el día en que desapareció y no tenía por qué ingresar al Regimiento. "Tenemos un solo acceso para tener un mayor control y ella no entró el viernes".
Además dijo que varios soldados fueron a declarar a la Fiscalía y que la policía se llevó esta tarde las pertenencias de la joven del Regimiento, por orden judicial. "Es la primera vez en mi carrera que vivo algo así. A veces los soldados llegan tarde o si faltan, los buscamos o los localizamos con familiares. Ojalá aparezca pronto".
