Alejandra Elipinali, una mamá que intenta vender 400 tartas para poder ayudar en la operación de su hija

Alejandra es una joven y luchadora mamá. Su hija Emilia, de 12 años, fue diagnosticada con un caso grave de escoliosis y necesita ser operada con urgencia. Si bien el padre de la pequeña correrá con los gastos de la cirugía, la mamá necesitará trasladarse hasta Buenos Aires para estar con ella y cuidarla por lo menos por un mes, en su recuperación. Para juntar fondos, se propusieron junto con una amiga, vender una de sus especialidades: tartas de diversas variedades.

"Estudié cocina aunque no me recibí. No lo hice como salida laboral sino porque me encanta cocinar para la gente que quiero, y preparar una mesa bonita. Pero cuando me encuentro con la realidad de tener que operar a mi hija, y de necesitar mantenerme allá pensamos en esto junto con una amiga.  En un primer momento calculamos tener que vender aproximadamente unas 400 tartas, pero tal vez sean más”, aseguró Alejandra a Diario La Provincia.

La ahora chef, asegura que se sorprendió con la solidaridad de la gente que incluso le propuso abrir una cuenta de ahorro, cosa a la que se negó.  "Me esperaba la solidaridad de la gente, pero no con esta magnitud. Me llamaron de una casa de viandas para donarme la masa, y también me ofrecieron dinero, pero yo lo único que quiero es que me compren tartas. Me encanta que a la gente le guste lo que cocino. Sé que son ricas porque de verdad las cocino como si fuesen para mis hijas, con mucho amor”, explicó.

Quienes estén interesados en colaborar, pueden hacer su pedido al mail saboresabordosj@gmail.com o a los teléfonos 155406493 o  4250185. Estas son las variedades con sus respectivos precios:

- verduras $100

- verdura y pollo $115

- choclo $110

- napolitana con jamón queso ,aceitunas, tomate y huevo duro $115

- alcauciles $120

 

-zapallito $85

-brócoli con un toque de roquefort $130

La jovencita tiene 12 años y lleva una vida normal. Pero desde el año pasado le detectaron un problema en su columna que es necesario solucionar rápidamente. "Mi hija creció muy rápido, lo que le produjo una gran escoliosis. La comenzamos a tratar con rpg, pero en seis meses le aumentó muchísimo. Su columna se le ha girado, tiene dos curvas en forma de "S”. Ella podría vivir así siempre y cuando no le siguiera avanzando, pero lamentablemente se siguió desarrollando.  El miedo también es que una costilla le pueda perforar el pulmón y eso sería grave”, contó Alejandra. 

"Gracias a Dios está bien, es una nena común que va al colegio, pero tiene un problema que hay que solucionar en el corto plazo. El médico nos dijo que no podíamos esperar más que hasta fin de año, en cuanto termine el ciclo escolar, ya que quiere salvarle las dos últimas vértebras que todavía no se le han torcido, y en el caso de que ocurra le comprometería la movilidad de su cintura. En palabras sencillas, le van a poner dos barrales con clavos que van a ir enderezando su columna, y eso le va a quedar para toda la vida. Sí o sí le van a tocar la médula, y siempre hay un pequeño riesgo, pero confiamos en que con el avance de la tecnología esto sea mínimo”, finalizó la mamá.