domingo, 14 de diciembre de 2014
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Tiene 19 años y de la mano de la enfermería conoció un "mundo" que sabía que estaba pero con el que nunca había interactuado. Hoy sabe que hablar de necesidades no significa comprarse ropa mejor o adquirir uno u otro electrodoméstico. Bárbara Videla es la candidata a Reina Nacional del Sol por Albardón y actualmente es estudiante de Enfermería. Junto a esta carrera cumple un rol de ayuda social muy fuerte, que quiere mantener más allá de ganar o no la corona más importante de la provincia.
"Uno cuando entra a estudiar esta carrera se encuentra que todo es distinto a lo que uno se imaginaba. Hay que dedicarle mucho tiempo y se necesita mucha práctica y muchas horas de estudio. No estamos trabajando con juguetes sino que estamos trabajando con vidas. Hay que tener una gran vocación. Escuché a varios que decían que lo elegían por la salida laboral pero si no tenes vocación el espíritu se enferma y cae. Es muy fuerte ver a la gente en mal estado en el hospital", contó la joven a Diario La Provincia.
Bárbara realiza actualmente prácticas en el Hospital Marcial Quiroga y en noviembre estuvo colocando vacunas con el Plan Nacional de Vacunación a los niños casa por casa. En esta ocasión se encontró con mundos opuestos totalmente distintos a lo que esperaba.
"Está bueno esto porque uno se da cuenta que las necesidades que uno tiene de comprar alguna ropa o cambiar el televisor no son verdaderas necesidades. Hay muchas personas cuyas necesidades son otras como poder vivir, son más bien de nutrición. Te topas con la realidad", señaló la joven quien contó que se topó con las dos realidades: la que dan los "barrios privados donde no tienen carencias" y el de las "villas donde no viven en buenas condiciones pasan hambre y hay chicos desnutridos".
"Además ves cosas y formas de vida de las que no estás acostumbrado a ver", aseguró.
Bárbara contó que el camino que le toca transitar de la mano de la formación en enfermería lo realiza con profesores que forman bajo el espíritu de ayudar al prójimo y respetarlo en todas las palabras. "Si o si tenes que tener un supervisor y eso te hace sentir acompañada. Es una profesora a cargo que muchas veces te aportan además de los conocimientos la experiencia que han tenido", agregó.
"Antes muchos enfermeros eran empíricos no de formación, tal vez por eso al momento de trabajar no saben cómo tratar bien al paciente. A nosotros nos enseñan cómo tratar a la gente", subrayó Bárbara quien confesó que "uno se encariña aunque no tendría que ser así. Al momento de trabajar tenes muchos más de acuerdo al servicio y la cantidad de enfermeros que hayan. Pero ahora como son pocos te encariñas".
Bárbara se define como "una persona sencilla y sensible" que le gustaría poder trabajar en un hospital publico el día que se reciba, más que nada en el de Albardón.
Ahora su cabeza se permite también soñar en la posibilidad de ser Reina Nacional del Sol. Para eso abre su cabeza a la posibilidad de recibir nuevos conocimientos y experiencias de vida que le sumen a su carrera personal y profesional.
