De acuerdo a los tiempos judiciales, esta semana, el juez Benedicto Correa debería definir el pedido de Claudia Moya, la principal acusada de matar de una puñalada a su marido Alfredo Turcumán, de obtener el beneficio de detención domiciliaria.
La defensa de la mujer hizo una presentación argumentando que el Penal de Chimbas no es un ambiente propicio para que transite el final de su embarazo. Sin embargo, el seguimiento de su gestación no consignó complicaciones.
Moya quiere dar a luz fuera del Penal y regresar cuando esté autorizada por los médicos. La familia de Turcumán se mostró en contra del pedido y afirmaron que se trata de una maniobra de la mujer.